domingo, 2 de febrero de 2014

Oraciones impersonales

Cada día cuando me levanto, miro desde mi ventana
el transitar de gente en este cruce de mi ciudad.
Hoy llovía mucho. La gente cruzaba con sus paraguas
de colores, de un lado para otro.
Es muy temprano y hace frío.
La mañana es gris, y el ruido de los coches,
ensordece mis oídos, como cada día.
No se vive bien en esta ciudad. El humo,
los coches, el ruido y estos inviernos tan fríos.
Siempre hay muchas personas, de aquí para allá.
Anochece muy pronto en invierno y el sol es
difícil de ver.
La rutina me aburre y se hace insoportable. Necesito
ver el sol, descansar mis oídos y respirar aire limpio.
En ciudades más pequeñas, se vive mejor. Me gustaría
poder vivir en una ciudad donde al asomarme a la ventana
pudiera ver vegetación, y dejar de ver este horrible, gris y
húmedo cruce.